Cómo hacer la Declaración de la Renta sin llorar | Parte I
Pagar nuestros impuestos al estado es algo obligatorio y para siempre, sin embargo, en el colegio ni siquiera lo mencionan. Vamos a ver cómo conseguirlo sin crearnos un trauma permanente
⏱️ Tiempo de lectura: 10 minutos
La declaración de la renta tiene unas fechas específicas para realizarla, que la Agencia Tributaria anuncia a principio de cada año. Por ejemplo, en 2025 comienza el 2 de abril y finaliza el 30 de junio, Eso nos deja 3 meses para enfrentar este trámite sin prisas… o para dejarlo para el último día y entrar en pánico.
Pero ojo, no todas las obligaciones fiscales siguen este calendario, como por ejemplo la presentación del modelo 720, obligatorio si tienes más de 50.000 € en cuentas o inversiones en el extranjero, cosa muy común si utilizas durante muchos años un bróker extranjero para invertir, como expliqué en cómo elegir tu compañero de ahorro.
Es importante que conozcas tus obligaciones tributarias para evitar sanciones de Hacienda, además con intereses. Ten en cuenta que, por lo general, las infracciones relacionadas con los impuestos prescriben a los 4 años, por lo que nos podrían reclamar los errores acumulados de los últimos 4 años.
Aprovechando que falta un mes para que empiece la campaña de la renta, vamos a desglosar paso a paso cómo hacerlo sin que se convierta en un infierno. Porque sí, el tema es largo y denso, pero si lo abordamos bien, llegaremos a la línea de salida con todo bajo control.
¿CÓMO EMPEZAR?
Normalmente, la declaración de la renta se presenta por internet, aunque tenemos la posibilidad de hacerlo tanto presencialmente como por teléfono. Nosotros nos vamos a centrar en la primera opción, ya que es la que nos permite no depender de nadie y mirar todo con detalle y sin prisas.
Primero os dejo la alternativa oficial por si preferís guiaros por el estado antes que por mí. Si al final soy el elegido, accedemos al siguiente enlace, donde necesitaremos o bien un certificado digital o utilizar el sistema Cl@ve PIN. Si no tenemos nada de esto, el primer paso es obtenerlo.
A continuación nos pide identificarnos como representante de un tercero o no, por lo que indicamos que actuamos en nombre propio.
Por último, dentro del listado de servicios disponibles, seleccionamos el servicio Renta WEB.
¡Listo! Ya estamos dentro de nuestra declaración.
Recuerda que la renta puede variar según la comunidad autónoma en la que vivas o la situación familiar que tengas. Al final, todo depende de lo que nuestros "amigos de arriba" (A.K.A. el político de turno) hayan decidido añadir, quitar o modificar en los impuestos. Aunque, como bien dijo Milton Friedman:
“Nada es más permanente que un impuesto transitorio”
BORRADOR Y DATOS PERSONALES
Lo primero que debemos hacer al entrar es revisar el borrador de nuestra declaración. Hacienda no nos obliga a meter los datos desde cero (gracias a los dioses de la burocracia), sino que rellena automáticamente la información con los datos que ya tiene.
Esto lo vemos en el siguiente botón:
Si eres trabajador por cuenta ajena, tienes una nómina y no has recibido otros ingresos, el borrador suele estar correcto. En este caso, bastaría con aceptarlo. Peeero… antes de darle al botón de confirmar, revisa bien las deducciones y reducciones autonómicas, porque ahí puede haber dinero que Hacienda no te va a regalar si no lo reclamas.
Por ejemplo, en Madrid puedes deducirte el 30% del alquiler hasta un máximo de 1.237,20 € al año, siempre que cumplas ciertos requisitos. ¿Cómo impacta esto en tu declaración?
Si ganas 30.000 € brutos al año y te han retenido 5.000 €, en teoría, no deberías pagar ni recibir nada más.
Pero si aplicas esta deducción, Hacienda te devolverá 1.237,20 €.
Estas ventajas las podéis ver en las páginas web de cada CC. AA. (os dejo el ejemplo de Madrid), aunque también os lo preguntan antes de presentar definitivamente la declaración, por lo que hay que estar atento de no saltárnoslo.
Aparte de esto, merece la pena revisar que nuestros datos sean correctos en el siguiente botón, en la parte superior de la pantalla de resumen:
Una vez revisado esto, nos vamos a meter al barro.
APARTADOS DE LA DECLARACIÓN
Nuestra declaración se descompone en los siguientes apartados:
Además, también tiene en consideración nuestra situación familiar, si seguimos vivos y nuestro porcentaje de discapacidad.
CÓMO NAVEGAR POR CADA UNO DE LOS APARTADOS
El sistema de la declaración de la renta está estructurado en páginas. En 2024 había 22 páginas, pero eso no significa que haya 22 apartados. Algunas son interminables, así que las dividen en varias secciones.
Dentro de cada página, encontrarás casillas en las que puedes:
Introducir un número (por ejemplo, tus ingresos).
Escribir un texto (en casos puntuales).
Seleccionar opciones en un desplegable (como tu estado civil).
La navegación es sencilla, con botones para avanzar, retroceder o ir al índice. Pero cuidado, porque si saltas a otra sección, luego puede ser un lío volver al punto exacto donde estabas (así que mejor toma nota mental o haz capturas).
El sistema guarda automáticamente los cambios, así que no necesitas hacerlo todo de una vez. Puedes entrar, rellenar un poco, salir a tomar un café (o llorar un rato) y luego seguir sin problema.
Cada casilla tiene un número de referencia.
Esto es clave porque puedes buscar ayuda en la página oficial de la Agencia Tributaria, donde puedes seleccionar el año de la declaración (recuerda que en 2025 presentamos la renta de 2024).
📌 ¿Mi consejo? Olvídate de navegar manualmente por los 1001 apartados de la web oficial (sí, son muchos). Lo mejor es buscar en Google el número de casilla, junto con "Agencia Tributaria" y entrar en el enlace oficial.
🤖 ¿Y usar IA para esto? No lo recomiendo. Aquí no queremos una aproximación, sino datos 100% verificados. Mejor ir a la fuente oficial y evitar errores que luego nos puedan costar dinero.
¿PUEDO PEDIR AYUDA?
Hay varias formas de pedir ayuda si sientes que te supera:
🏛️ Cita presencial en Hacienda
Si prefieres que un funcionario te ayude cara a cara, puedes pedir una cita en Hacienda. Ten en cuenta que no te van a optimizar la declaración, solo a rellenarla con los datos que tienen.
Puedes pedir cita en la web de la Agencia Tributaria o por teléfono.
📞 Ayuda telefónica ("Le llamamos")
Si no quieres o no puedes desplazarte, Hacienda ofrece un servicio llamado "Le llamamos". Básicamente, reservas una cita y te llaman para hacer la declaración contigo por teléfono.
📌 Cosas a tener en cuenta:
Al igual que en la cita presencial, solo te ayudarán si tu declaración es sencilla.
Tendrás que enviarles documentación por adelantado si te la piden.
Es recomendable estar con el ordenador delante para seguir el proceso en tiempo real.
🏢 Gestoría: la opción fácil (pero no gratis)
Si no quieres complicarte la vida, puedes recurrir a una gestoría. Aquí:
✅ Te ahorras quebraderos de cabeza.
✅ Te ayudan con casos más complejos, como inversiones, alquileres o autónomos.
✅ Pueden optimizar tu declaración para pagar menos (de forma legal, claro).
🔸 ¿El problema? Hay que pagar. Los precios varían, pero rondan entre 50 € y 150 € por una declaración estándar. Además, deberías revisarla, porque son cientos los casos que conozco que se la han hecho mal, con su posterior multa de la que, por supuesto, no se hacen responsables.
DOCUMENTACIÓN
Uno de los puntos más importantes al hacer la declaración de la renta es tener toda la documentación que respalde lo que declaramos. Porque si algo no le cuadra a nuestros amigos de Hacienda, no van a fiarse de nuestra palabra, sino que nos pedirán pruebas.
💡 ¿Cómo conseguimos esa documentación?
Las entidades bancarias y las empresas suelen enviar entre marzo y mayo un resumen fiscal con nuestra información. Este documento es clave por dos razones:
Para comprobar que el borrador de Hacienda es correcto.
Para justificar cualquier dato en caso de requerimiento.
📌 Importante: Hacienda puede pedirnos información de los últimos 4 años, así que mi recomendación es tener una carpeta en la nube (Google Drive, Dropbox, OneDrive…) con la documentación organizada por años. Así evitamos dramas si nos hacen una revisión.
MUY IMPORTANTE: Si piensas dejar tu trabajo o cerrar una cuenta bancaria, asegúrate de descargar toda la documentación antes. Una vez te hayas ido, pedir estos documentos puede ser un auténtico infierno burocrático. Recuerda
📢 Hacienda somos todos… pero sobre todo lo eres tú.
Por cierto, ¿conoces el directorio gratuito de newsletters de Substack en español?: Es la respuesta a varios diálogos en Notas sobre cómo conseguir que los hispano-hablantes podamos encontrar newsletters en español sobre nuestros intereses favoritos.
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